Tibor Navracsics (VezsprĆ©m, 1966) es el comisario hĆŗngaro de Educación, Cultura, Juventud y Deporte. Abogado y Doctor en Ciencias PolĆticas, fue profesor en su paĆs para luego dar el salto a la polĆtica en 2006. Fue vice primer ministro encargado de Administraciones PĆŗblicas y Justicia y Ministro de Asuntos Exteriores y Comercio. Ahora harĆ” casi cinco aƱos que estĆ” al cargo de una cartera europea muy apreciada por los ciudadanos, ya que entre sus trabajos se encuentra conseguir que el programa insignia de la UE, el Erasmus +, siga adelante.
Texto: Esther Herrera.
Fotos: Comisión Europea

La estrategia Europa 2030 ha fijado el objetivo de que el 40% de los jóvenes europeos tengan estudios superiores. ¿Nos acercamos a este porcentaje?
En la Ćŗltima dĆ©cada, Europa ha vivido una gran expansión de la educación superior. Cuando empezamos a trabajar en el marco de la estrategia Europa 2020, aproximadamente un tercio de los adultos jóvenes en Europa tenĆan un tĆtulo universitario. En 2017, este porcentaje era del 39,9%. Esto significa que estamos a punto de llegar, aunque ya sabemos que, de promedio, las mujeres en Europa ya llegaron en 2012.
Sin embargo, hay importantes diferencias: tenemos cinco paĆses donde mĆ”s de la mitad de los adultos jóvenes tienen un tĆtulo universitario (Suecia, Luxemburgo, Irlanda, Chipre y Lituania) y, al mismo tiempo, hay tres paĆses que estĆ”n por debajo del 30% (RumanĆa , Italia y Croacia). EspaƱa tiene una tasa alta, y sobrepasó el 40% ya en el aƱo 2007.
Sabemos que los ciudadanos que tienen niveles mĆ”s altos de educación tienen un riesgo menor de paro, tienden a tener sueldos mĆ”s altos, se benefician de las oportunidades de la formación continua y juegan un rol mucho mĆ”s activo en la sociedad. Sin embargo, para garantizar que tantos los ciudadanos como la sociedad en su conjunto puedan obtener el mĆ”ximo de beneficios, tenemos que seguir trabajando para asegurar que la educación superior dĆ© a las personas las competencias y la formación necesaria en el mercado laboral actual y el del futuro. Los graduados universitarios deben tener posibilidades de encontrar un trabajo y, aquĆ, aĆŗn queda trabajo por hacer.
āLa recuperación económica tan positiva que hemos visto en Europa ha contribuido a un problema: el aumento de la demanda de trabajadores poco cualificados en sectores como el turismo y la construcción. Esto es algo que los Estados miembros deben abordar.ā
También se han marcado el objetivo de reducir un 10% el abandono escolar. ¿La UE estÔ a tiempo de conseguirlo?
En promedio, el abandono escolar se ha reducido en los Ćŗltimos aƱos, tambiĆ©n en el caso de EspaƱa, donde ha disminuido sustancialmente. AsĆ que creo que sĆ es posible alcanzar el objetivo 2020; de hecho, estamos muy cerca de ello. No obstante, si observamos detenidamente las cifras entre los Estados miembros se puede ver que todavĆa hay regiones y determinados grupos de la sociedad que estĆ”n lejos de este objetivo. La brecha de gĆ©nero estĆ” entre uno de los principales retos. La situación es aĆŗn mĆ”s difĆcil entre los paĆses del sur y sudeste de Europa, especialmente entre las personas migrantes. La recuperación económica tan positiva que hemos visto en Europa, sin embargo, ha contribuido -al menos de alguna forma- a un problema: el aumento de la demanda de trabajadores poco cualificados en sectores como el turismo y la construcción. Esto es algo que los Estados miembros deben abordar.
Muchos niƱos en Europa sufren acoso en los centros escolares, especialmente por su identidad u orientación sexual. ĀæCómo cree que se deberĆa tratar esta cuestión?
La violencia en las escuelas es un problema muy extendido en nuestra sociedad, y esto es inaceptable. Un informe reciente de la Comisión Europea asegura que los jóvenes LGTBI sufren los niveles mÔs altos de prejuicios y de violencia. Hay que crear un ambiente educativo seguro para todos los niños y jóvenes. El Programa Erasmus + ya lo ha apoyado a través de 200 programas que fomentan la igualdad en el colectivo LGTBI, la movilización de los jóvenes, y dando apoyo a asociaciones y contribuyendo al debate público.
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āMuchas de las tareas del futuro necesitarĆ”n personas que aprendan constantemente y que sepan moverse en un ambiente competitivo, adaptĆ”ndose, pensando de forma crĆtica, trabajando en equipo, demostrando liderazgo y con iniciativa.ā
Precisamente, para este año se ha propuesto aumentar los fondos de Erasmus+ en 300 millones de euros (10% mÔs que en 2018). ¿Esperan también un aumento del número de estudiantes que se beneficien del programa?
Estoy muy contento de que haya un nuevo aumento del presupuesto para este aƱo. Esto significa que mĆ”s estudiantes tendrĆ”n la oportunidad de viajar fuera o de hacer unas prĆ”cticas. Queremos enfocarnos especialmente en conseguir que estudiantes que conviven en entornos mĆ”s desfavorables puedan beneficiarse del programa. El aumento tambiĆ©n ayudarĆ” a la movilidad de acadĆ©micos y de trabajadores administrativos, asĆ como apoyarĆ” la formación profesional, actividades para los jóvenes y para el deporte. De hecho, queremos tener un programa mĆ”s accesible e inclusivo con mĆ”s oportunidades para todos, estudiantes de universidad y formación profesional. SegĆŗn el Ćŗltimo informe sobre Erasmus, en 2017, con un presupuesto de 2.600 millones, dimos oportunidad a casi 800.000 personas que destinaron su tiempo a formarse, aprender y hacer voluntariado. Y para el próximo perĆodo 2021-2027 queremos doblar el presupuesto a 30.000 millones de euros. Esto nos permitirĆ” que el programa sea aĆŗn mĆ”s inclusivo, mĆ”s internacional y enfocado a la innovación.
La formación continua es una herramienta que ha ayudado a muchos trabajadores a encontrar mejores trabajos y al mismo tiempo les ha permitido seguir formÔndose. ¿Qué ha hecho la Comisión Europea para promocionarla?
Nunca se deja de aprender. La formación continua en la educación y la formación profesional son esenciales si queremos tener Ć©xito en reducir la brecha digital y hacer que la gente se adapte a los mĆŗltiples cambios de su futura carrera profesional. Muchas de las tareas del futuro necesitarĆ”n personas que aprendan constantemente y que sepan moverse en un ambiente competitivo, adaptĆ”ndose, pensando de forma crĆtica, trabajando en equipo, demostrando liderazgo y con iniciativa. De hecho, la UE estĆ” promocionando este enfoque a travĆ©s de todas sus polĆticas educativas.
El aprendizaje durante la etapa adulta es también importante. Promovemos el intercambio de buenas prÔcticas entre Estados miembros; promovemos la investigación e invertimos en la formación de los individuos. Alrededor del 5% del presupuesto de Erasmus+ estÔ destinado a la movilidad del personal docente; para cooperación entre organizaciones internacionales, como centros educativos para adultos. Para ayudar a que el sector sea mÔs efectivo, la Comisión Europea también invierte en EPALE, una plataforma electrónica para cualquier persona que trabaje en la formación para adultos.
A través de la Tarjeta Europea de Estudiante y de la red de Universidades Europeas, la Comisión quiere mejorar su competitividad. ¿Pero no encuentra que en este campo los centros europeos aún estÔn lejos del nivel de las universidades norteamericanas?
Debemos llevar la cooperación europea al siguiente nivel. Esta es la función de la red de Universidades Europeas y la Tarjeta Europea de Estudiante. Estas iniciativas nos permiten transformar nuestra educación superior para que sea mĆ”s innovadora, mĆ”s relevante e inclusiva. AdemĆ”s, los campus de la red de Universidades Europeas podrĆ”n llevar equipos transnacionales de profesorado e investigadores y encarar los retos mĆ”s importantes de la sociedad, implicando a los estudiantes de todos los niveles educativos gracias a una forma dinĆ”mica e innovadora de aprender. Los estudiantes tambiĆ©n podrĆ”n adaptar su plan de estudios entre las diferentes universidades obteniendo, asĆ, un tĆtulo europeo. AdemĆ”s, la Tarjeta Europea ayudarĆ” a la movilidad para que sea mĆ”s fĆ”cil, tanto para los estudiantes como para las universidades, reduciendo la burocracia. Y nos gustarĆa que todo este proceso innovador con las Universidades Europeas sea una realidad a partir del 2025 en todo el continente. Esto contribuirĆ” a que nuestras universidades sean mĆ”s competitivas y atractivas para estudiantes de todo el mundo.
āLa red de Universidades Europeas y la Tarjeta Europea de Estudiante nos permiten transformar nuestra educación superior para que sea mĆ”s innovadora, mĆ”s relevante e inclusiva.ā
Hace un año nació la iniciativa DiscoverEU que permite a los jóvenes de 18 años viajar por toda Europa con la ayuda de fondos europeos. En un momento de creciente desafección con la UE, ¿cree que harÔ que se sientan mÔs cercanos al proyecto europeo?
SĆ, absolutamente. DiscoverEU les da la oportunidad de aprender sobre la cultura europea y su diversidad y vivir la experiencia de lo que significa ser europeo de cerca. Es simple y accesible para todos, sin importar su origen. DiscoverEU juega un rol clave porque da a los jóvenes europeos oportunidades para viajar fuera y desarrollar una identidad europea. Por ello, queremos fortalecer la iniciativa a travĆ©s del programa Erasmus a partir de 2020. Cerca de 180.000 jóvenes europeos se presentaron a la iniciativa para obtener alguno de los casi 30.000 billetes que ofrecimos en 2018.
Espero que la experiencia de los jóvenes con DiscoverEU no sea el final de su historia con Europa, sino el comienzo. Les puede inspirar, tambiĆ©n, a participar en mĆ”s programas europeos. AdemĆ”s, me gustarĆa que se convirtieran en embajadores para Europa, no sólo votando en las elecciones al Parlamento Europeo, sino motivando a sus amigos para que hagan lo mismo, ayudando a crear la Europa del futuro gracias a sus acciones.